El 10 y 11 de noviembre se llevó a cabo un seminario en El Colegio de México llamado “Continuidad y cambio político en México”. A lo largo de siete mesas de trabajo expusieron sus análisis unos 35 académicos que hablaron sobre el presidencialismo, el régimen, el congreso, los estados, la reforma judicial, los derechos humanos, el sistema electoral, las relaciones exteriores, la ideología, la sociedad civil, la gobernabilidad y las políticas públicas. Con todo ese material se pueden construir algunas preguntas sobre dónde se encuentra nuestro sistema político y cómo ha cambiado en los últimos años.
1. ¿Cuál democracia? Uno de los temas más debatidos fue el del tipo de democracia que teníamos y la que se ha construido con el proyecto autollamado de la 4T. Como parte del pluralismo del seminario se fijaron al menos dos posturas, una que condenó a la transición a la democracia llamándola “noventera”, “liberal”, con reglas y procedimiento que sólo le dieron voz a las clases medias y altas, pero que excluyeron a las grandes mayorías. Una visión muy ideológica. Por esas razones el movimiento obradorista vino a cambiar esas referencias por un sistema de democracia “popular”, “plebeya”, que significó “un cambio cultural” (cualquier cosa que eso signifique). Una parte del debate se centró en la confrontación de esas dos visiones. Hubo un choque de edades entre la generación de la llamada transición democrática, que ve en la 4T un regreso autoritario, y los que defienden a la 4T y dicen que México “es el país más democrático del mundo”, como afirma la presidenta Sheinbaum.
2. ¿Y la ideología? Hubo una especial atención al debate y la confrontación que se da entre el populismo y el liberalismo, como dos grandes ejes en pugna en estos momentos, en donde la democracia a nivel global está en retroceso y bajo ataque de las nuevas derechas y las tendencias autocráticas. Se habló de populismo para caracterizar al actual régimen que se inició en México a partir de 2018. Las críticas al neoliberalismo fueron múltiples, y hubo poca defensa del liberalismo. Se destacó que en el nuevo régimen —que se ha construido en nuestro país—, la narrativa y la ideología han sido claves para construir una visión hegemónica de la política de la 4T.
3. ¿Y la sociedad civil? Uno de los ángulos del seminario fue analizar el tema de la “ciudadanía”, como un concepto que ha perdido visibilidad frente al de “pueblo”, que ahora forma parte central de la narrativa oficialista. Otro tema que se revisó fue el de los intermediarios que aparentemente han desaparecido y en su lugar domina la relación líder-pueblo. Una contradicción destacada es la de un gobierno que se reclama de izquierda, pero condena todas las expresiones y movimientos independientes (feminismo, ambientalismo, expresiones contra la violencia y la extorsión, luchas por medicinas, etc.).
4. ¿Un Estado concentrado es más fuerte? Además de la recarga del hiperpresidencialismo con la 4T, se puso en cuestión de qué forma la destrucción de múltiples políticas públicas del régimen anterior, ha debilitado las capacidades del gobierno actual. Sin dejar de lado que seguimos siendo un país que es un “enano fiscal”. Un ejemplo de la destrucción fue la política en ciencia y tecnología, en donde han bajado todos los indicadores.
5. ¿Y los jueces electos? Las dos características que necesita un poder judicial que funcione para resolver conflictos es tener jueces con capacidades y con independencia. La actual reforma judicial tiró a la basura esas dos partes y alineó los incentivos en sentido contrario: con una fuerte conexión hacia el sistema político.
6. ¿Cómo nos relacionamos con el mundo? Sin saber hacia dónde vamos hoy por el eclipse del fenómeno Trump, el sexenio pasado sí hubo un cambio importante porque México dejó jugar un papel importante en los escenarios e instituciones internacionales, para pasar al discurso de que “la mejor política externa era la política interna”.
7. ¿Y el futuro inmediato? Como broche de oro para redondear al nuevo régimen vendrá una reforma electoral; llegará otro T-MEC; seguirá el modelo de acumulación de capital y la narrativa hegemónica de un régimen populista. ¿Se intensificará la lucha política en las calles, como sucedió el pasado 15?
Investigador del CIESAS. @AzizNassif

