Metepec, Méx.— Migrantes que llegaron este año al albergue Hermanos en el Camino han decidido regresar a su lugar de origen por el endurecimiento de la política migratoria, la corrupción de instituciones mexicanas y la falta de apoyo gubernamental.

“Algunos han preferido mejor regresar a sus países de origen ya derrotados y cansados, yo creo que 50%, otros prefieren quedarse aquí en México, buscar un trabajo y hacer una vida, pero tampoco pueden ahorita, no les ayudan nada, ¿qué pueden hacer?”, dijo Armando Vilchis Vargas, director y fundador del albergue, que actualmente resguarda a 45 personas, dos de ellas deportadas de Estados Unidos.

Señaló que en lo que va del año no han logrado un solo permiso del gobierno de México para que los migrantes puedan trabajar legalmente, por lo que cuestionó el actuar de las autoridades federales y municipales, y destacó el respaldo de la sociedad civil.

“Son las personas quienes mantienen este lugar. Llegan con bolsas de arroz, frijol, artículos de higiene. Sin ellos no podríamos alimentar a 45 personas tres veces al día, les agradecemos siempre”, enfatizó Vilchis Vargas.

El director del albergue hizo un llamado a los tres niveles de gobierno para que traten con dignidad a los migrantes, les den apoyo, acompañamiento y seguridad, ya que se encuentran a la deriva.

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