Jorge Rivero, el galán que conquistó con su escultural cuerpo y se convirtió en actor por casualidad

Jorge Rivero, el galán del cine mexicano en la década de los 70 y 80 gozó de éxito, fama y aplausos, fue considerado un sex symbol que se convirtió en actor por mera casualidad; la estrella escultural que arrancó los suspiros al por mayor, cumplió 87 años el pasado 15 de junio.

Rivero estudió ingeniería química, estudió en Alemania pero dejó la carrera en el momento que fue tentado por el mundo artístico, un mundo en el que triunfó, no sólo en México, también en Hollywood.

El actor fue exitoso gracias a su gracia, sus actuaciones y su atractivo físico, hizo del ejercicio su estilo de vida, pues decía que "uno es lo que come", por lo que su disciplina en esta materia le permitió figurar en el fisicoculturismo, la natación y el waterpolo.

En Estados Unidos brilló junto a estrellas como John Wayne, Charlton Heston, Glenn Ford y Candy Cave; es en Estados Unidos donde Rivero vive feliz y tranquilo junto a su esposa, la escritora estadounidense Betty Moran, donde está alejado de la algarabía y la euforia de la que alguna vez estuvo rodeado.

Jorge Rivero, un galán nato. Fototeca EL UNIVERSAL.

Jorge Rivero, un actor por casualidad

Jorge Rivero fue de visita a los Estudios Churubusco cuando el productor de cine mexicano Gregorio Wallerstein le propuso de buenas a primeras que participara como estelar en la película "Jinete de la pradera".

Lee también: Enrique Lizalde, el actor que no daba entrevistas y que no quiso ser considerado un galán

"Yo no supe ni qué decir. Había ido a los estudios como cualquier visitante. Don Gregorio me vio y a los pocos minutos estaba firmándole un contrato", confesó a EL UNIVERSAL hace unas décadas atrás.

Fototeca EL UNIVERSAL.

Su carrera siempre ha estado acompañada de la suerte; Rivero confesó a este diario en julio de 1970 que encontró su verdadera vocación en la actuación a pesar de que no tenía planeado dedicarse a eso.

Su espectacular físico siempre fue motivo de elogios y también de alguna que otra crítica que trataron de demeritar su talento innato como actor.

Jorge Rivero se convirtió en un sex symbol que fue cotizado en Hollywood y México. Fototeca EL UNIVERSAL.

"Algunas veces han dicho que solo tengo músculos, pero yo siento la actuación como algo natural", dijo entonces.

Y es que cuando apareció Jorge Rivero en decenas de películas como "El mexicano", "Pedro Páramo", "El pecado de Adán y Eva", "Estafa de amor", "La bastarda" y "Bellas de noche", se popularizó el estilo de galán como atleta.

En bastantes películas, por ejemplo "El mexicano", se añadió una cláusula al contrato para que Jorge Rivero apareciera con el torso al descubierto.

Se convirtió en el galán del cine mexicano y Hollywood lo tenía por el número uno de los seductores latinos; trabajó con éxito en las fotonovelas.

Fue reconocido por tener un tórax vigoroso, un pecho de acero y unos bíceps de campeón.

Fototeca EL UNIVERSAL.

"El deporte siempre me agradó. Y procuro cuidar mi físico. Es la base de la salud", considera.

En la época criticaron a Jorge porque en ciertas escenas los directores de películas ordenaban la violencia extrema, por ejemplo, que rasgaran su a fin de que luciera su impresionante musculatura.

Esto no le molestaba a Rivero, quien lo consideraba algo legítimo.

"Creo que es un recurso legítimo. Veamos. Una mujer tiene bonitas piernas, ¿por qué no ha de vestir una minifalda?, ¿por qué no ha de bailar si precisamente esa es su gracia?".

Fototeca EL UNIVERSAL.

Rivero compartió pantalla con estrellas que ya murieron como Andrés García, Sasha Montenegro, Carmen Salinas e Isela Vega.

Jorge Rivero trabajó en historias de muchos géneros, entre ellos películas del oeste, comedias y dramas; lució en las pantallas como galán y comediante, siempre aspiró a ser una estrella internacional y lo consiguió, en Hollywood fue un héroe y México lo fue todo, sobre todo un galán irrepetible.

rad